El perfume que más se vende (¡no es broma!)
La neurociencia lo confirma: los olores influyen en nuestro estado de ánimo, amplifican los sabores y hacen que los recuerdos sean más indelebles.
No es casualidad que las marcas más evolucionadas lo estén apostando todo al Marketing Olfativo, una estrategia que utiliza el sentido del olfato para enriquecer la experiencia del cliente y aumentar las ventas.
Piensa en cuando saboreas un helado de limón fresco un día caluroso....
Si en el aire hay aunque sea un leve aroma a jazmín, tu cerebro podría reactivar esa misma emoción experimentada años atrás, tal vez durante unas vacaciones en Sicilia, entre el mar y los aromas del verano.
Sí, los olores pueden guiar las elecciones de compra y ofrecer una experiencia multisensorial memorable.


Un experimento realizado en Bélgica demostró que difundir un aroma de chocolate en una librería durante 30 minutos al día aumentaba un 40% las ventas de libros de cocina y novelas románticas.
Todo gracias a un aroma capaz de evocar emociones y provocar compras espontáneas.
¿Y si lo aplicaras a tu local?
Imagina a un cliente que entra y es recibido por un aroma que recuerda a las natillas recién hechas o a las dulces notas del chocolate:
✨ se relaja
✨ se siente mimado
✨ se queda más tiempo
✨ elige instintivamente (quizá un poco más).
En el mercado puedes encontrar fácilmente infinidad de fragancias ideales para difundir dentro de tu local.
Un perfume es impalpable, pero el marketing olfativo es muy concreto y puede ayudarte a retener a los clientes en tu local.